Como su nombre lo indica, el Sand Blast es un proceso de arena y presión. Sin embargo, este sistema no emplea necesariamente arena para su funcionamiento abrasivo a presión.

Se utiliza el Sand Blast para limpiar superficies por la acción de un abrasivo granulado expulsado por aire comprimido de una boquilla. Es ideal para remover óxido, escama de laminación y cualquier tipo de recubrimiento.

Algunos de los materiales en los que se puede utilizar el Sand Blast son:

  • Vidrio
  • Mármol
  • Azulejo
  • Madera
  • Fierro
  • Cerámica
  • Aluminio
  • Concreto
  • Cobre

Algunos de los muchos beneficios que da el Sand Blast son:

  • Reducción de tiempo de trabajo en limpieza
  • Mayor anclaje y adherencia del recubrimiento
  • Mejor uniformidad de superficie
  • Minimiza costos de mano de obra
  • Mayor pureza del material con mínimo esfuerzo